19/03/2024 PUENTEDEMANDO.COM
La nueva infraestructura portuaria de Nador West ha llamado la atención de Pekín. Los motivos no son otros que el potencial del nuevo puerto alauita y no solo por su dimensión y capacidades logísticas, sino por su situación geográfica. La finalización de las obras está prevista para finales de 2024 y supone un punto de concentración previo, para aquellas mercancías que, exportándose desde el continente africano, tienen como destino diversos puntos de Europa. Todo ello primando el transporte marítimo y el acercamiento a destino, minimizando en la medida de lo posible el transporte terrestre. El gigante asiático necesita reconfigurar algunos de los tramos de su ruta intercontinental, para sortear obstáculo arancelarios y geopolíticos.
El futuro Puerto de Nador será un peso pesado en las rutas que llegan y parten desde el Mediterráneo para llegar a otros destinos europeos. Un futuro hub logístico con capacidad para manipular hasta cinco millones de contenedores anuales, 25 millones de toneladas de granel liquido en forma de combustibles, siete millones de toneladas de granel sólido y tres millones de toneladas de otras mercancías, creando miles de empleos en su hinterland. Al transbordo en sus instalaciones, se unirá la llegada de las exportaciones procedentes de países limítrofes y sin salida a la costa. Algunos de estos como Chad, son productores de crudo y gas. En el continente africano son 15 países los que carecen de salida directa marítima, lo que frena en gran medida su crecimiento económico y desarrollo.
Si bien el futuro puerto marroquí de Dajla, podría ser una alternativa para algunos de estos estados como Burkina Faso, Chad, Mali o Níger para exportar sus productor a través de la costa atlántica, la futura macro instalación de Nador, aporta otra alternativa para las rutas con destino el norte de Europa. Todo esto sin contar la importante producción local marroquí, que dispondrá de una alternativa directa de exportación hacia otros puertos, evitando trasbordos y reduciendo los tiempos de traslado para los productos frescos.
El puerto estratégicamente situado entre las rutas este-oeste, a tan solo 50 km de Melilla, podría ser una instalación clave para la ruta de la seda. Sus grandes calados y su polivalencia lo convierten en un enclave idóneo para ello. Transversalmente, Pekín sigue incrementando su cooperación comercial con el Reino Alauí, convirtiéndose en el tercer socio comercial de Rabat con un volumen de 7000 millones de euros solo durante el ejercicio 2022.
China no ha escatimado inversiones en Marruecos, sobre todo en el sector industrial, transporte, minero y energético. El nuevo recinto portuario de Nador y sus zonas logísticas, podrían ser la puerta de entrada de sus productos para millones de consumidores en el continente africano.
Marruecos ve en Pekín a un socio que aporta valor y le ha ofrecido recientemente la nueva mega terminal de mil millones de euros, a la Compañía estatal Cosco Shipping Corporation. De momento la naviera estatal china no se ha pronunciado, pero ha establecido una sede en Casablanca.
El transbordo de mercancías en la zona dependerá de cuatro grandes instalaciones de primer nivel y muy próximas entre si. Tánger, Nador, Algeciras y Valencia. Marruecos ha logrado consolidar Tánger Med como un Hub competitivo en continuo crecimiento, llegando a mover casi 9 millones de contenedores durante 2023. Ante una situación que comercialmente no beneficia a nadie, ha surgido una iniciativa para crear un necesario modelo de integración de las cadenas logísticas regionales y de cooperación entre puertos. En esta línea, el puerto de Algeciras, con buen criterio, está ejecutando el Plan Hércules, para integrar la cadena de valor regional y reforzar la relación con los países del sur para no llegar tarde al futuro.