25/03/2025 EL MERCANTIL
Las prisas iniciales por aprobar el proyecto de Ley de Movilidad Sostenible en el Congreso de los Diputados ha dado paso al hartazgo en el sector del transporte de mercancías, especialmente en el transporte por carretera y en la última milla, los dos campos que afrontarán un mayor número de cambios con la entrada en vigor de esta normativa. Según las fuentes consultadas por este periódico, las comunicaciones con el ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible son constantes en esta materia, pero los avances resultan tan lentos que el tejido empresarial da por hecho que su aprobación se alargará a finales de ejercicio, o incluso al año que viene, si hay que orientarse en términos puramente políticos.
“Nos llega que se ha reactivado en el Congreso, pero no tiene plazos rígidos”
Nuria Lacaci Secretaria general de la Asociación de Cargadores de España (ACE)
Ello choca con las intenciones principales del Gobierno, que tendrían que haberse materializado ya a finales del año 2022 primero y a finales del año pasado después. Entre un periodo y otro tuvo lugar la convocatoria de elecciones generales de 2023, que volvió a paralizar el proceso. Cabe recordar que el mensaje inicial fue que de la aprobación de esta normativa en el tiempo y la forma dictada por la Comisión Europea dependían los fondos de recuperación de Bruselas. Posteriormente, tanto el sector como el propio ministerio tranquilizaron los ánimos asegurando que los plazos no eran tan rigurosos y que aún se contaba con el margen del primer trimestre de 2025.
“Se está haciendo muy pesado porque la coyuntura política es compleja y no acompaña”
Jordi Espín Secretario general de Transprime
Ello hace pensar a la asociación de cargadores que la urgencia de los plazos y de contar con el último paquete de fondos europeos no lo eran tanto. “Todo lo que venía, como la digitalización de los documentos de transporte, está muy bien, pero percibimos un desinterés completo”, remacha Lacaci. Menos categóricas se muestran otras organizaciones de cargadores y fabricantes como Transprime, que no pone en duda la importancia y el interés general de esta normativa, pero que coincide en el análisis de fondo. “Se está haciendo muy pesado porque la coyuntura política es compleja y no acompaña”, señala el secretario general de la asociación, Jordi Espín.
Cabe señalar que el Gobierno necesita de la aprobación de una mayoría parlamentaria de la que actualmente no dispone para sacar adelante la Ley de Movilidad Sostenible, y unas negociaciones en un terreno político tensionado y caracterizado por las concesiones podrían alargar los trámites muchos meses más. “Esto por supuesto que es importante, pero ¿qué es más estratégico? ¿Que exista un pacto de mayoría con el Gobierno o la urgencia de optar a los fondos europeos?”, ejemplifica Espín.
Recientemente, el ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ejecutaba un cambio de caras en las primeras filas de la negociación al situar a Elena Maria Atance al frente de la dirección general de Transporte por Carretera y Ferrocarril, hasta este momento ocupada por Roser Obrer, que ha sido cesada como parte de una estrategia para “dar un nuevo impulso a la gestión del ministerio”, aseguró en su momento el departamento que dirige Óscar Puente. Dicho cambio también podría haber hecho pisar el freno en la tramitación de la ley, según señalan los cargadores. “Ya damos por hecho que a cuestiones como la digitalización, programada para 2026, no llegamos”, puntualiza Jordi Espín.
“Todo dependerá también de cuánto quiera correr Bruselas con su propia ley de movilidad”
Carmelo González Presidente del CNTC
Este periódico se puso en contacto el pasado lunes con el ministerio de Transportes para preguntar por los avances en materia de negociación, el nuevo calendario previsto para la aprobación de la moratoria y qué posibles estrategias hay sobre la mesa en caso de que finalmente la votación arrojara una mayoría insuficiente para su puesta en marcha. Hasta la fecha, El Mercantil no ha recibido respuesta del Gobierno. Patronales logísticas como la propia UNO se manifiestan en el mismo sentido: desmienten haber recibido ninguna comunicación oficial acerca de la reactivación de esta cuestión.
Del lado de la carretera, el secretario general de Fenadismer, Juan José Gil, deja caer que “estamos más preocupados por cuestiones como la declaración de intenciones sobre los peajes o por el tema de los carburantes y el diésel” que por la Ley de Movilidad Sostenible. Y en el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC) sí consta la existencia de nuevas negociaciones e incluso la presentación de alegaciones por parte de algunos grupos políticos y empresariales. “Pero a este mes no llegamos ni de broma”, descarta su presidente, Carmelo González. No se atreve a aventurar una fecha exacta, pero González cree que para finales de año sí podría estar lista, aunque “también dependerá de cuánto quiera correr Bruselas con su propia ley de movilidad”, matiza.
Be the first to comment