09/01/2018 EL VIGÍA
Tras cerrar otro año de crecimiento y con unos indicadores que reflejan, de forma cada vez más inequívoca, que la actividad se ha recuperado y es percibida ya por todo el sector del transporte y la logística, toca ser optimistas. Las importaciones y exportaciones continuaron creciendo, el sector siguió creando empleo, la cifra de negocio mantuvo la tendencia alcista y en el nuevo cuadro que se dibuja para 2018, los expertos coinciden en señalar que será un año decisivo y dorado para el comercio exterior.
En este contexto, el sector tendrá que hacer frente a una de sus grandes amenazas, como es el déficit de conductores profesionales, para evitar que pueda frenar estas expectativas de crecimiento. “Comenzamos el año con optimismo fundado respecto a la actividad tanto de exportación como de importación, ya que la previsión de crecimiento del PIB a lo largo de 2018 es positiva y, por ello, la actividad del transporte continuará su senda ascendente”, explica el director general de Astic, Ramón Valdivia, que espera que este incremento de la actividad se refleje también en la cuenta de resultados de las empresas y en el incremento de conductores profesionales. “De no tomar medidas, el creciente número de camiones parados supondrá un retroceso en la actividad”. En su opinión, el principal reto al que se enfrenta el transporte por carretera es combatir la falta de profesionales.
Esta problemática también la observa el gerente de la Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas (AEFP), Juan Diego Pedrero. Aunque inicia el año con un estado de ánimo positivo, sobre todo por la implicación de Fomento en el relanzamiento del sector ferroviario de mercancías, asegura que uno de los principales desafíos que afrontan las empresas de su colectivo, además de incrementar su cuota ferroviaria, es el de “estabilizar nuestros efectivos de conducción para evitar los graves desajustes que venimos sufriendo en los últimos dos años”.
Con el foco puesto también en el capital humano, el presidente de Feteia-Oltra, Enric Ticó, considera que uno de los grandes retos que deberá hacer frente el sector es la formación profesional y continúa de los empleados. “Esto redundará en una mayor competitividad de las empresas”, señala Ticó, cuyas previsiones apuntan que “este año conseguiremos el relanzamiento definitivo del comercio exterior de nuestro país, que permita a nuestra sociedad recuperar cotas del estado del bienestar”. Además, la asociación transitaria continuará insistiendo ante las distintas administraciones para que la Ventanilla única Aduanera sea una realidad en España, “pues será un procedimiento y herramienta muy eficaz y rentable para las empresas de comercio exterior”.
Esta ola de optimismo se traslada también al sector logístico, donde el presidente de la Asociación Española de Mensajería (AEM), Alberto Genescà, se muestra convencido de que el mercado seguirá creciendo a buen ritmo este año. A su juicio, mantener la calidad y mejorar el servicio que ofrecen las compañías a las que representan gracias al capital humano es uno de los grandes retos de este sector, por lo que entiende que “sería necesaria una revisión de precios”.
En cuanto al sector marítimo, cuyos tráficos han seguido mostrando cifras récord en el último año, el director general de Anave, Manuel Carlier, comenta que 2018 será un año determinante desde el punto de vista de las normativas medioambientales. En este sentido, recuerda que, en abril, la OMI deberá acordar su estrategia provisional para reducir las emisiones de CO2 del transporte marítimo y, por otro lado, en dos años entrará en vigor el límite de 0,5% de contenido de azufre en los combustibles. “Todas las soluciones que impliquen modificaciones en la maquinaria y/o los tanques de combustible deben iniciarse o contratarse este año”, concluye.
Cambio de rumbo para el sector de la construcción y la ingeniería española
El ejercicio 2018 podría suponer un cambio de rumbo para el sector de la construcción y la ingeniería, que afrontan el nuevo año ilusionados, a pesar de los ajustes presupuestarios de 2017. En el caso de la ingeniería, el director general de Fidex, Fernando Argüello, se muestra optimista respecto a las perspectivas que abre la nueva ley de Contratos del Sector Público que entrará en vigor el 9 de marzo. “Esta ley califica con rotundidad a los servicios de ingeniería como servicios de carácter intelectual y prohíbe la contratación de este tipo de servicios en base a su precio como aspecto fundamental”, explica el directivo, que añade que “abre las puertas a un cambio de cultura low-cost por otra de calidad y búsqueda de la eficiencia a largo plazo”.
Por su parte, el presidente de la Asociación Española de la Carretera (AEC), Juan Francisco Lazcano, se muestra convencido de que 2018 “puede ser el año del golpe de timón para la red viaria española”. Según explica, si a la llamada de atención realizada recientemente por el Banco de España –que alertaba de que “una inversión pública tan baja no garantiza siquiera el mantenimiento, lo que está ocasionando la pérdida de una parte del parque de infraestructura–se suman otras, como la que lanzará la asociación en los próximos meses tras conocer los resultados de la última auditoría del estado de conversación de las carreteras, o la realizada por la DGT sobre el aumento de la accidentalidad y mortalidad en 2017, “no podemos menos que esperar que el Gobierno tome cartas en el asunto con la urgencia que la situación exige”. Lazcano comenta, además, que el Plan Extraordinario de Inversión en Carreteras presentado en julio supuso un balón de oxígeno para el sector en el último año. Entre los retos a los que se enfrenta este colectivo, desde la AEC destacan los vehículos autónomos y conectados, eléctricos, los megatrucks, los drones en la gestión viaria o la adaptación de las infraestructuras al cambio climático, entre otros.
