04/04/2024 EL MERCANTIL
El transporte de mercancías disfrutará de un máximo de tres años de exención en las nuevas restricciones que la Generalitat de Catalunya quiere imponer en las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) de la comunidad. Se trata de una de las novedades anunciadas en el Plan de Calidad del Aire, la norma que uniformizará las ZBE catalanas y que el Ejecutivo catalán está ultimando, con la mira puesta en aprobarlo por decreto en las “próximas semanas”. Entre sus medidas más destacadas, figura la fijación de fechas para restringir el acceso a vehículos de etiqueta B en las grandes ciudades a partir de 2026, un aspecto que preocupaba a las asociaciones de transportistas, las cuales lamentaron la poca disposición al diálogo por parte de la Generalitat en la conformación del nuevo reglamento.
El documento considera vehículos de mercancías a los de tipo N1, N2 y N3
Según los detalles que ha anunciado el consejero de Acció Climàtica de la Generalitat, David Mascort, el último redactado de la norma (tras pasar por dos periodos de información pública) ha aumentado en un año el periodo de exención al transporte que figuraba en su formulación anterior. Entonces, “las furgonetas y los vehículos implicados en la distribución urbana de mercancías” contaban con un año de exención, y otro más de tipo “transitorio” en el cual los municipios podían otorgar “un máximo de 52 autorizaciones excepcionales diarias”. El texto también especifica que “se consideran servicios de transporte de mercancías los vehículos de categoría N1 (con peso bruto de 3,5 toneladas), N2 (hasta 12 toneladas) y N3 (más de 13 toneladas)”.
La nueva excepcionalidad también les protege, durante esos tres años, de las restricciones a las etiquetas B, que también han vivido una cierta variación en el texto definitivo. Por tanto, 2026 es la primera fecha de restricción, afectará a todos los diésel de etiqueta amarilla en las ciudades de más de 50.000 habitantes, pero sólo en los días en que haya alertas por niveles altos de contaminación de nitrógeno de óxido (NO2). A partir de 2028, eso sí, entra en vigor la prohibición para todas las etiquetas B en todas las ZBE de más de 50.000 habitantes en Catalunya. En los municipios de más de 20.000 habitantes, se mantiene la prohibición en los días de altos niveles de NO2 a partir de 2028.
Los representantes de la Generalitat han señalado que el plan ha incorporado muchas de las alegaciones recibidas en el último periodo de información, que fueron especialmente numerosas por parte de los municipios del área metropolitana de Barcelona. De hecho, Acció Climàtica manifiesta que “se ha estado trabajando con el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y con los alcaldes y alcaldesas” para consensuar la aplicación definitiva de las ZBE.
Entre las actuaciones del reglamento, existen 170 exclusivamente dedicadas a la movilidad, ya que la Generalitat identifica “el tráfico rodado” como “la principal fuente de contaminación atmosférica, de ruidos y de efecto invernadero en las ciudades catalanas”. La administración autonómica también recoge datos que apoyan una reducción de esa contaminación durante el periodo de implementación que lleva la ZBE de Barcelona, iniciado en 2019. Con todo, el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, ya señaló en febrero que su objetivo era el de consensuar con el máximo de sectores posibles la llegada de más restricciones, adaptando los tiempos a esas negociaciones. El sector transportista ya protagonizó una dura negociación con el anterior equipo municipal y la AMB en 2022, que acabó con la suspensión de la primera ZBE por parte del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC).
