13/03/2024 NEXOTRANS
España se encuentra rezagada en el ranking de infraestructura de recarga en 2023, al igual que la penetración de vehículos electrificados en nuestro país. Según el Barómetro de electromovilidad de Anfac, la valoración de España en este indicador es de tan solo 6,7 puntos sobre 100, lo que representa un aumento mínimo de 2,8 puntos. En comparación, la media europea ha experimentado un crecimiento de 4,8 puntos, alcanzando una valoración total de 14,4 puntos. Esto significa que España se encuentra 7,7 puntos por debajo del promedio europeo. Es importante destacar los avances significativos logrados por Países Bajos y Noruega, quienes lideran el ranking con 71,1 y 60,4 puntos respectivamente. Estos países han quintuplicado y cuadriplicado la media europea en términos de infraestructura de recarga.
La Ley de Movilidad Sostenible debería ser la herramienta para lograr esa gobernanza
Durante el año 2023, se ha registrado un importante aumento de 11.173 nuevos puntos de recarga en la infraestructura de acceso público. Esto representa el mayor crecimiento anual desde la publicación del primer Barómetro de la Electromovilidad de ANFAC en 2019, alcanzando un total de 29.301 puntos. Anfac destaca que, además del número de puntos, es necesario considerar la calidad de los mismos, especialmente en términos de potencia. Es fundamental promover la instalación de puntos de recarga ultrarrápida para reducir los tiempos de carga de los vehículos eléctricos. Es destacable el crecimiento de los puntos de recarga ultrarrápida, habiéndose añadido 827 nuevos puntos con una potencia mínima de 150 kW durante el año. Sin embargo, en España aún no existen puntos de carga específicamente dedicados a vehículos pesados, ni en términos de potencia ni en términos de accesibilidad. Además, se ha identificado que hay 7.728 puntos fuera de servicio en la red actual de acceso público. Estos puntos pueden estar en mal estado, averiados o aún no conectados a la red eléctrica. Representan aproximadamente el 21% del total de la infraestructura. Aunque es importante mencionar que se ha reducido en 1.141 puntos con incidencias en comparación con el tercer trimestre. Si todos estos puntos estuvieran operativos, España contaría con un total de 37.029 puntos de recarga pública. Esto elevaría el indicador de infraestructura del Barómetro de electromovilidad de ANFAC a 8,6 puntos, superando a Portugal e Italia y pasando de los actuales 6,7 puntos.
Desde la primera edición de este Barómetro, Anfac ha utilizado datos de fuentes privadas (Electromaps) para España y ha realizado un análisis detallado de los mismos. Se han descartado los puntos de recarga de acceso público que no están operativos y no permiten carga simultánea, según la normativa europea. Para el resto de los países se han utilizado los datos publicados por EAFO. Aunque el dato usado para España puede no coincidir con el de EAFO, la asociación considera más preciso el análisis realizado con fuentes privadas. Dado que la plataforma oficial de puntos a nivel nacional carece de información actualizada, Anfac, como representante de los fabricantes de automóviles, es consciente de la urgencia e importancia de la entrada del vehículo electrificado y una red de recarga de acceso público adecuada en España. En el marco del Foro Anfac»Juntos hacia el Futuro», se presentaron un conjunto de medidas 360º para impulsar el mercado electrificado, consolidar la posición industrial de España y avanzar hacia un modelo de movilidad sostenible.
La sustitución urgente del actual Moves por un plan con ayudas directas es abogada por la patronal. Además, se propone el establecimiento de un Centro Estatal para el despliegue de infraestructuras de recarga de vehículos eléctricos y repostaje de vehículos alternativos (CEIRVEA) como instrumento prioritario de apoyo para la planificación y seguimiento. Este centro sería coordinado por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. También se sugiere una fiscalidad que incentive la compra de vehículos de cero y bajas emisiones, especialmente en las empresas. Por último, se plantea reforzar la actual política industrial para potenciar las fortalezas industriales de España y atraer nuevas inversiones y proyectos.
«El principal vector de este nuevo ecosistema es el vehículo electrificado, y el sector se compromete con una movilidad sostenible. Los datos de recarga de este año muestran resultados positivos, lo que demuestra que es posible circular sin problemas por el territorio con un vehículo eléctrico. Sin embargo, no estamos avanzando al ritmo adecuado. Nos hemos quedado muy lejos de alcanzar los 45.000 puntos de recarga establecidos para cumplir los objetivos del PNIEC para 2030. Este año, la exigencia aumenta a 64.000 puntos, lo cual duplica la red actual. El despliegue de puntos de recarga interurbanos está tomando más tiempo del deseado y, si no aceleramos y solucionamos la falta de coordinación y gobernanza, el mercado y la infraestructura se desconectarán. Por esta razón, es necesario acelerar y establecer objetivos vinculantes no solo para 2030, sino también para 2024, 2025 y así sucesivamente. La Ley de Movilidad Sostenible debería ser la herramienta para lograr esa gobernanza», señala José López-.
