Fijando un nuevo rumbo

19/09/2022 TRANSPORTE XXI

Los puertos apuestan por reforzar plantillas, extender la digitalización y la sostenibilidad en el Marco Estratégico, pendiente de aprobar por el Ministerio de Transportes, punto de partida para optimizar el modelo de gobernanza.

Los cambios producidos en el entorno mundial, así como la progresión que han logrado los puertos españoles, tienen suficiente calado como para aconsejar una reformulación de su Marco Estratégico, los criterios de actuación y los objetivos generales de un modelo que urge modernizar.

El actual Marco Estratégico, que fue aprobado en 1998, ha permitido alcanzar un desarrollo adecuado del sistema portuario, según el organismo público Puertos del Estado. Hoy, los puertos necesitan modernidad, digitalización y flexibilidad, dentro de un modelo que mantiene la pervivencia del sector público en su explotación.

El nuevo Marco Estratégico tiene como objetivo sentar las bases para ajustarse mejor a las necesidades de los sectores de actividad económica del área de influencia, y ofrecerá una oferta más apropiada a los intereses de las personas y empresas decididas a utilizar el modo marítimo.

El documento, tras dos años de elaboración, fue ‘validado’ por el Consejo Rector de Puertos del Estado el pasado 5 de septiembre y enviado al Ministerio de Transportes que tiene que tramitar su contenido con el resto de ministerios implicados, según han confirmado a Transporte XXI fuentes del organismo que preside Álvaro Rodríguez Dapena. Su contenido se guarda con celo, “pendiente de los últimos retoques”.

El mayor obstáculo para el desarrollo de los programas del Marco Estratégico está en la asignación de nuevos recursos de personal para las Autoridades Portuarias, explican fuentes solventes. Todo indica, por lo que ha trascendido de fuentes próximas a Puertos del Estado, que la Comisión Ejecutiva de la Comisión Interministerial de Retribuciones (CECIR) continuará teniendo la última palabra en la concesión de plazas para el relevo o incremento de personal en el conjunto de las autoridades portuarias.

La CECIR es el órgano colegiado encargado de coordinar las actuaciones en materia de relaciones de puestos de trabajo y retribuciones de personal de la Administración del Estado. Está formado por altos cargos de los ministerios de Hacienda y Administraciones Públicas.

“No es de recibo que puertos como Algeciras tengan el mismo o menor personal cuando mueven 100 millones de toneladas que cuando movían veinte millones, así no se puede mejorar la explotación y gestión de los puertos”, indican los medios consultados por este periódico.

Hay que recordar que Rodríguez Dapena indicó el pasado mes de abril, a preguntas de Transporte XXI, que “las dimensiones económica, ambiental y social del Marco solo se pueden cumplir con determinado capital humano extendido y reestructurado”. Los puertos habilitaron en sus presupuestos de 2022 una extensión del 15 por ciento de las plantillas, unas 900 personas, que son las necesidades mínimas que las Autoridades Portuarias han planteado, un crecimiento de la masa laboral que continúa pendiente de materializar.

Críticas sectoriales

Por otro lado, en cuanto a los aspectos que recoge el Marco Estratégico, fuentes empresariales han calificado el documento como “poco ambicioso para los tiempos que corren”, mientras que desde sectores más críticos se tilda a la regulación como “humo” para mantener durante otros diez años al sistema portuario sin una evolución a una mayor desregulación y privatización de los organismos que explotan las dársenas.

Puertos del Estado explica que la renovación del Marco Estratégico tiene como objetivo la mejora de todo el sistema. En concreto, diseñar una renovación adecuada a los cambios en el entorno, estableciendo las bases para alinear procesos y estructura organizativa al nuevo modelo estratégico, y definir una “cultura compartida” que recoja principios y valores a los que debe tender el conjunto de enclaves españoles

El documento tenderá a recoger el modelo de desarrollo estratégico, los criterios de actuación, así como los objetivos de gestión técnicos, económicos, financieros y de recursos humanos del sistema portuario. El resto de los instrumentos de planificación (Planes Estratégicos, Planes Directores de Infraestructuras y Planes de Empresa) deben responder a los objetivos.

El documento apuesta por puertos competitivos, seguros, implicados con la sociedad, que apuesten por la digitalización y por la innovación y que sean referentes en sostenibilidad medioambiental, como clave para favorecer el crecimiento económico y la creación de puestos de trabajo con el horizonte de 2030. Y lo hace desde siete puntos de vista: la eficiencia, la conectividad, la digitalización, la innovación, la sostenibilidad, la seguridad y la transparencia.

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