Morosidad a la baja en el transporte

28/04/2022 TRANSPORTE XXI

Descendieron las reclamaciones, en general, y las demandas por impagos, en particular, rompiendo esta tendencia los litigios por operaciones de ‘ecommerce’, que se presentaron ante la Junta Arbitral del Transporte de Cataluña el año pasado.

Las reclamaciones, en general, y las demandas por impagos, en particular, presentadas ante la Junta Arbitral del Transporte de Cataluña bajaron en 2021. Algo que en el segundo año de pandemia ha causado cierta sorpresa a los propios expertos. La morosidad se estancó en 2020 en relación a 2019 y se preveía un repunte de los litigios al prolongarse la crisis sanitaria.

No ha sido así. Las demandas presentadas ante el organismo mediador (377) han bajado el 20 por ciento. En el caso concreto de los impagos, que supusieron el 44,8 por ciento de las reclamaciones, el descenso ha sido superior al 30 por ciento.

La recesión provocada por la crisis financiera de 2008 llegó a generar más de 900 reclamaciones en un año y más del 90 por ciento eran por impagos.

La morosidad baja porque “han cuajado las modificaciones normativas que se han ido realizando durante los últimos años. Queda más constancia escrita de los contratos entre transportistas y entre cargadores y transportistas. Incluso, el pago es anticipado en operaciones singulares (puntuales)”, señala Xavier Hormigos, responsable de la Junta Arbitral del Transporte de Cataluña. También ha ayudado “la desaparición de actores tóxicos, comisionistas de poca solvencia”, añade el experto. Rompen la tendencia a la baja las reclamaciones por los servicios de paquetería, que crecen ante el disparado incremento de las operaciones de ecommerce. El importe total de las reclamaciones ascendió a 898.527 euros, siendo la media por caso de 2.383,36 euros. Aunque se presentaron menos demandas, la Junta Arbitral batió récord de actividad al emitir un total de 502 laudos el año pasado.

El nuevo Real Decreto que recoge, entre otras medidas, la prohibición de la carga y descarga por parte del conductor, “puede generar controversia y acabar afectando a la actividad de las Juntas Arbitrales”. En todo caso, “este es un año importante para ver si se confirman estas tendencias que apuntan a una reducción o estancamiento de las demandas por impagos y un crecimiento de las reclamaciones derivadas de los servicios de paquetería”. Al final, “habrá que ver la afectación de la crisis económica por la guerra, así como las reivindicaciones de los transportistas y las modificaciones legislativas”.