Barkala: “Tras tanto daño causado, debemos descartar cerrar esta crisis en falso”

11/11/2020 DIARIO DEL PUERTO

La huelga de la estiba en el Puerto de Bilbao ha superado ya el mes de duración dejando una profunda huella que va mucho más allá de las estadísticas de tráfico, extendiendo sus daños a las empresas de la comunidad portuaria y a industrias usuarias esenciales para la economía y el empleo del hinterland en una coyuntura especialmente crítica a causa de la pandemia.

Con ser ya graves, las consecuencias de las afecciones provocadas por la movilización sindical amenazan con proyectarse  en los próximos años ante la pérdida de reputación y de la confianza que muchos operadores tenían depositadas en el enclave vizcaíno.

El presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao, Ricardo Barkala, en un análisis de la situación realizado a instancias de Diario del Puerto, muestra su honda preocupación por un conflicto que le hace vaticinar “años duros” para el puerto, al tiempo que lanza un mensaje de confianza ante la posibilidad de un cambio de rumbo que permita “curar estas profundas heridas”.

Sin vencedores ni vencidos

Asimismo, Barkala, quien califica la huelga como “dolorosa y absurda”,   sostiene que tras el daño causado “hay que descartar cerrar esta crisis en falso, como si nada hubiera ocurrido”. Tras 33 días de huelga, el presidente de la AP de Bilbao prefiere ir más allá de los datos de tráfico mensuales al hacer balance de este mes, porque las consecuencias de esta huelga “irán más allá de los números y las variaciones interanuales”.

Resulta obvio que los datos de tráficos serán muy malos pero Barkala destaca los negativos efectos inducidos para los próximos años y advierte de que en este conflicto “todos vamos a perder, y mucho”. “No existirán vencedores y vencidos, todos los actores vinculados al Puerto de Bilbao van a resultar damnificados, incluidos los propios trabajadores de la estiba”, recalca.

“Que nadie se equivoque, en este conflicto todos vamos a perder, y mucho. No existirán vencedores y vencidos, todos los actores vinculados al Puerto de Bilbao van a resultar damnificados, incluidos los propios trabajadores de la estiba”

“Drama” evitable

Junto al  elevado número de barcos desviados a otros puertos y las mercancías transportadas camión o en tren, y las numerosas empresas con problemas de abastecimiento o imposibilidad de expedir su producción, Barkala señala que los accionistas de las empresas ubicadas en el puerto se cuestionan su operativa en el puerto y se plantean otras opciones a pesar de las inversiones realizadas. “Sin duda, estas graves afecciones generalizadas se traducirán en un elemento clave para la supervivencia de muchas empresas de nuestro entorno y en las correspondientes pérdidas de empleo. También en una importante reducción de jornadas de trabajo de estiba. En definitiva, un verdadero drama que debiera haberse evitado”, lamenta el presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao.

“Sinrazon”

Pero más allá de las toneladas perdidas durante la huelga, Barkala advierte del riesgo de que los tráficos perdidos retornen una vez finalizado el conflicto. “como si nada hubiera ocurrido”.

“No será así -añade- ya que son muchos años de soportar un mal funcionamiento del servicio de estiba, de estar pendientes de preavisos de huelga y de realizar huelgas, de una conflictividad permanente, como para que los clientes se animen nuevamente a apostar con garantías por el Puerto de Bilbao”

En su análisis, lamenta que todo el esfuerzo realizado en misiones comerciales, visitas, negociaciones, bajadas de tasas, mejoras en las infraestructuras y servicios, inversiones en innovación, digitalización y equipamientos,…

“Todo este trabajo de años se pierde de golpe por la sinrazón, por la negación de no admitir una obligada realidad, normativa y operativa, que tiene que ver con el cambio de modelo de este sector y que llevamos demasiado tiempo retrasando, con las consecuencias a las que ahora nos enfrentamos en Bilbao”

“Rumbo y consenso”
Ricardo Barkala aboga porque el conflicto de la estiba tome un rumbo diferente al seguido hasta ahora, de forma que se pueda alcanzar un consenso que, en su opinión, debiera construirse sobre las siguientes cuatro bases:

1.- Mantenimiento del empleo de calidad, sin necesidad de concentrar el debate en los salarios.

2.- Eliminar la actual enorme rigidez en la contratación y en la organización del trabajo, materias que deben ser de exclusiva responsabilidad de las empresas estibadoras.

3.- Pactar unas condiciones laborales adaptadas a las necesidades operativas del servicio, en aspectos clave como las jornadas efectivas, los horarios o la formación.

4.- Y, por último, la sujeción del desarrollo de la actividad, así como de las condiciones del diálogo en el seno de la negociación colectiva, al cumplimiento de la legalidad. Como no podría ser de otro modo.

 “Se están infringiendo las normas de la huelga”

“La imagen, la fiabilidad, la reputación y el crédito del Puerto de Bilbao se encuentra en uno de sus momentos más bajos”. Son palabras de Ricardo Barkala, quien añade que “muchas cosas tendrán que cambiar y mucho tiempo tendrá que transcurrir, para cambiar esta realidad y conseguir que los clientes vuelvan a confiar en nosotros”.

Los 34 días de huelga ya trascurridos y los 29 que, de momento, restan por delante, están deteriorando la imagen de puerto “serio y profesional que tanto nos ha costado labrar durante años. Sin duda destruir es mucho más fácil y rápido que construir”, dice el presidente del Puerto de Bilbao.

Barkala, quien en ningún momento cuestiona el derecho a la huelga, matiza que el ejercicio de la “huelga también tiene sus normas, en su origen y en su desarrollo, que en este caso se están infringiendo”. Se refiere, en particular, al incumplimiento de los servicios mínimos, la ralentización de los trabajos y los tiempos de espera, “que doblan e incluso cuadruplican los tiempos habituales”.

“Pelos en la gatera”

Asimismo, Barkala da por hecho que para llegar a la actual situación de conflicto, “todas las partes habrán obrado de buena fe y consideran que tienen la razón”,  al tiempo que constata que  han sido incapaces de alcanzar acuerdos. “Y si esto es así, ¿por qué una de las partes rechaza someter el conflicto al servicio público vasco de arbitraje facilitado por el PRECO?, se pregunta.

El presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao considera que los sindicatos no han medido las consecuencias de este “durísimo camino de conflicto emprendido” y que al iniciar esta estrategia, “no se había pensado en el puerto de destino y muchísimo menos en la duración de la travesía”. En este sentido, cree que sería “aún más doloroso pensar que esta situación que soportamos en Bilbao haya sido conscientemente planificada”.

En todo caso, Ricardo Barkala advierte que tras el daño causado por la huelga,  “no se debe cerrar esta crisis en falso, como si nada hubiera ocurrido”.

“Cuánto más fácil, inteligente y beneficioso hubiera resultado, sabiendo, como todas las partes implicadas conocen, los verdaderos motivos de esta huelga, haber marcado un rumbo diferente, en el que hubiéramos alcanzado un espacio de consenso en el que todos estuviéramos razonablemente cómodos, a pesar de que, como en toda negociación, hubiéramos dejado todas las partes algún pelo en la gatera”, reflexiona el presidente de la Autoridad Portuaria de Bilbao.


Legalidad vigente como garantía de futuro

Ricardo Barkala muestra su preocupación porque los sindicatos no acepten la legalidad vigente emanada de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de 2014, y defiende que, en base a esa aceptación, se alcancen acuerdos. El presidente del Puerto de Bilbao, quien augura “años duros” para el puerto, inmerso en una especie de “tormenta perfecta”, consecuencia de la pandemia sanitaria y de la crisis económica en curso, del inminente Brexit y de esta “dolorosa y absurda huelga”. A pesar de todo, cree que “nunca es tarde para cambiar de rumbo, de aceptar realidades” y urge a una desconvocatoria inmediata de la huelga y a que las partes sometan las discrepancias negociadoras a un arbitraje vinculante.

“Tardaremos mucho en curar estas profundas heridas, pero dado que conocemos el diagnóstico, apliquemos el tratamiento correcto, sin dejar a nadie atrás. Debemos entre todos retomar el camino correcto, juntos, pero sin atajos, con sujeción a la legalidad y con el doble objetivo de mejorar la competitividad del servicio portuario de estiba y por ende del Puerto de Bilbao, y de mantener este empleo de calidad asociado. Nos jugamos mucho, el presente, pero sobre todo el futuro”.


Barkala dice que los accionistas de las empresas del puerto se cuestionan su operativa en Bilbao y se plantean otras opciones a pesar de sus inversiones. Foto J.P.

Bilboestiba CPE rechaza valorar la última propuesta sindical “por vulnerar la ley”

Bilboestiba CPE ha rechazado valorar la última propuesta sindical “porque vulnera la legislación vigente”. Según  las empresas, dicha propuesta propone mantener las “tareas complementarias o servicios comerciales en términos análogos al convenio actual”. A juicio de Bilboestiba CPE, este planteamiento es “innegociable” al haber sido declarado ilegal por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) así como por sucesivas sentencias de la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo.

Ante los llamamientos a la negociación hechos públicos durante los últimos días por los sindicatos, las empresas insisten en proponer un arbitraje que comprometa a las partes “porque es la única opción que demuestra una auténtica vocación negociadora”. Conviene recordar, en este sentido, que durante la última ronda de contactos el comité de empresa decidió prolongar la huelga un mes.

En todo caso, para Bilboestiba CPE las condiciones para entablar cualquier negociación “pasan necesariamente por desconvocar la huelga, recuperar los rendimientos de trabajo normales y permitir el trabajo de personal externo en las labores complementarias”.

Por otra parte, el Puerto de Bilbao ha perdido un 67% de mercancía general y un 54% de contenedores durante el mes de la huelga de la estiba. Según datos facilitados por Bilboestiba CPE, entre el 9 de octubre y el 9 de noviembre se registraron 43 escalas menos (-21 %) con respecto a los 30 días anteriores que han supuesto la reducción del 55 % de las toneladas de carga seca manipuladas en los muelles.

Según Bilboestiba, estos datos “trascienden de la dinámica puramente portuaria e inciden muy negativamente en la actividad económica como han puesto de manifiesto últimamente numerosas empresas, asociaciones e instituciones”.

Cabe reseñar, finalmente, que no todos los datos registrados durante la huelga han sufrido grandes caídas. “A causa de la negativa de los eventuales de la ETT Randstad a trabajar los fines de semana, los trabajadores fijos hicieron más turnos en noches y fines de semana, que conllevan un plus adicional”, dice Bilboestiba.

Además, al impacto del incumplimiento de los servicios mínimos, ya denunciados por las empresas, se suma una ratio de absentismo de casi el 20% (un 3% atribuible al Covid) que no supone merma económica para los trabajadores puesto que Bilboestiba complementa el 100% del salario.

Política de privacidad Aviso legal Política de cookies