19/10/2020 TRANSPORTE XXI

El anteproyecto del muelle de la ampliación norte de la dársena continúa en manos de Puertos del Estado, que deberá ratificar sus modificaciones antes de finalizar el presente ejercicio.

Terminal Investment Limited (TIL) tendrá plenamente operativa su nueva terminal robotizada del puerto de Valencia en 2027. Esa es la fecha que baraja la Autoridad Portuaria de Valencia, según anunció Aurelio Martínez, presidente del enclave, en una comparecencia celebrada el pasado viernes 16 de octubre en la Comisión de Obras Públicas, Infraestructuras y Transportes de las Cortes Valencianas, a petición del grupo parlamentario de Ciudadanos.

Martínez explicó que la Autoridad Portuaria continúa a la espera de la respuesta de Puertos del Estado acerca de la adenda sobre el anteproyecto constructivo del muelle, la eliminación del dique de abrigo, así como las modificaciones realizadas tras desestimar las obras de dragado. Asimismo, TIL también está estudiando los cambios para observar cómo afectan al proyecto.

Los cambios se debieron al “impacto social” y a que había un informe técnico del Cedex sobre la agitación de las aguas ante la eliminación del dique “que lo permitía”, indicó Martínez. La inversión de la Autoridad Portuaria será de alrededor de 300 millones de euros.

Puertos del Estado tiene de plazo hasta finales del próximo mes de diciembre para refrendar el anteproyecto, que Martínez calificó como “documento complejo”, reiterando que “no hace falta una nueva Declaración de Impacto Ambiental”, al considerar que la ampliación del puerto (obras de abrigo) “está terminada”. Con posterioridad tendrá que pasar por el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria. El recinto a rellenar en la ampliación norte será de 126 hectáreas, que, junto con la superficie existente, ofrecerá un área de 136 hectáreas.

Los siete años que marca el puerto de plazo teórico podrían avanzarse con la puesta en servicio de una primera fase de la instalación, una vez se despejen los “problemas políticos” que han envuelto a la ampliación norte, sobre la que aún queda por saber el anteproyecto definitivo y si las modificaciones realizadas pueden variar, de alguna forma, la hoja de ruta de TIL, así como su apuesta inversora superior a los 1.000 millones de euros.

Automatización

La futura terminal, llamada a modernizar el modelo de estiba de España con la introducción de la automatización en las grúas marítimas, permitirá situar a Valencia como tercer puerto de contenedores de Europa. La capacidad teórica de la instalación, con una superficie de 136 hectáreas, será de 4,8 millones de TEUs. El muelle deberá posibilitar el atraque de cuatro megabuques de forma simultánea, barcos de más de 24.000 TEUs, con una eslora de 430 metros, con un calado máximo de 19,2 metros, si bien el calado del canal de acceso quedará limitado a 18,5 metros.

La terminal tendrá un muelle principal con una única alineación de 1.970 metros lineales y un muelle auxiliar en dos alineaciones, de 315 y 405 metros. Todas las operaciones marítimas y terrestres, salvo el acarreo de contenedores de patio al ferrocarril, quedará automatizado, sin la necesidad de contratar equipos en tierra para realizar estas labores. TIL situará en sus operaciones marítimas hasta 22 grúas ‘portainer’, operadas por control remoto.