25/09/2020 TRANSPORTE XXI

El tráfico de mercancías en tren está en una situación de “cuidados paliativos”, advierte el director de Planificación y Desarrollo de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez, en un coloquio ‘online’ organizado por Executive Forum.

Álvaro Rodríguez Dapena, director de Planificación y Desarrollo de Puertos del Estado, aseguró que la carga ferroviaria en España se encuentra en una situación de “cuidados paliativos”, al estar con una cuota del 5 por ciento, frente a la media del 17 por ciento de la Unión Europea y del 40 por ciento en Estados Unidos.

Así lo puso de manifiesto en un coloquio online organizado por Executive Forum, con la colaboración de Indra y Portel, tras apuntar que el ferrocarril en España en las últimas décadas “se ha centrado en el transporte de viajeros quedando las mercancías en una situación de falta de compromiso institucional y abandono, que nos ha situado los últimos en Europa”.

El ferrocarril movía en España hasta hace casi una década en torno a 30 millones de toneladas. Tras la crisis económica de 2008 y 2009 ha bajado sin recuperar posteriormente los volúmenes de los años citados, mientras que los modos de carretera y aéreo han continuado subiendo.

Sin embargo, Rodríguez recordó que “la carga en tren con origen o destino un puerto ha ido creciendo y continuará aumentando”. En la década de 1990, el tráfico ferroportuario no llegaba al 30 por ciento de las cargas totales y en la actualidad ronda el 50 por ciento.

El director de Planificación y Desarrollo de Puertos del Estado subrayó que “el futuro del ferrocarril pasa por enlazarse con los puertos y por generar carga marítimo-ferroviaria con destino a otras latitudes”.

Dentro del tráfico ferroportuario, en los últimos años ha crecido la exportación de las mercancías embarcadas procedentes del ferrocarril. Además, se observa una pérdida de cuota de la materia prima a granel a favor de la mercancía general, ya sea la convencional como los productos siderúrgicos o vehículos, como la que viaja en contenedor.

Álvaro Rodríguez señaló que “en los últimos años, el tráfico ferroportuario se ha ido escorando hacia los puertos de Barcelona y Valencia”, especialmente tras la desaparición de los grandes volúmenes de graneles energéticos destinados a las centrales térmicas, muchas de ellas situadas en el norte peninsular. No obstante, recalcó que el objetivo es “recuperar el ferrocarril para el conjunto del sistema portuario”.

El responsable de Puertos del Estado defiende que el ferrocarril tiene que replicar el éxito logrado con las autopistas marítimas en el transporte intrarregional. A su juicio, el puerto de Algeciras cuenta con potencial para “canalizar, a través de autopistas ferroviarias, el fuerte crecimiento de tráfico de la carga rodada procedente de otros puertos del Estrecho”.

El director de Planificación y Desarrollo remarcó que “para lograr una cadena marítima-ferroviaria eco-eficiente y competitiva es necesario trabajar en tres niveles: infraestructuras, operacional y prestación de servicios e infro-estructural”. Este último ámbito está dirigido a la mejora de la administración digital, interoperabilidad, inteligencia y sincromodalidad.

Por su parte, Lidia Muñoz Pérez, directora de Puertos y Aeropuertos de Indra, destacó el papel de la tecnología como “vector de impulso fundamental para afrontar los desafíos del sector logístico-portuario”. Estos retos pasarían por optimizar los flujos de carga en toda la cadena logística mediante la digitalización de procesos; potenciar la sincromodalidad con otros medios de transporte, principalmente con el ferroviario; aprovechar el valor del dato para mejorar la eficiencia y la automatización de las operaciones; y fortalecer la relación del puerto con su área de influencia teniendo en cuenta factores económicos, de sostenibilidad y seguridad.

Por último, Pedro García Gómez, Business Development Manager de Portel, apuntó que las operaciones y las infraestructuras portuarias generan información y valor para toda la cadena logística.