05/10/2018 NOTICIAS DE NAVARRA

Las obras para mejorar la seguridad de los túneles de Belate y Almandoz y adecuarla a la normativa europea han concluido antes de lo previsto y están a la espera de ser certificadas por parte del Gobierno de Navarra, que baraja poder reabrir al tráfico ambas infraestructuras situadas en la carretera N-121-A en unas pocas semanas, a finales de octubre o comienzos de noviembre, lo que supondría su puesta en servicio con más de un mes de adelanto respecto a la fecha que se habría programado inicialmente (diciembre).

El proyecto, con un presupuesto de adjudicación de 3,94 millones y que ha corrido a cargo de Construcciones Mariezcurrena, ha supuesto la creación en el túnel de Belate de dos nuevos apartaderos para detener los vehículos en caso de emergencia, así como la colocación de un sistema de drenaje para evacuación de líquidos tóxicos e inflamables y de un nuevo cableado resistente al fuego en ambos pasos. El nuevo apartadero sentido Irun se sitúa entre los puntos kilométricos 28,375 y 28,415, mientras que el del sentido Pamplona se ubica entre los puntos kilométricos 28,455 y 28,495. Cada uno de ellos, que tiene 40 metros de longitud y 3 metros de anchura, está dotado con un puesto de emergencia con postes SOS y dos extintores.

Para la ejecución de los trabajos, que se iniciaron en mayo, Construcciones Mariezcurrena se ha volcado y ha tenido personal trabajando las 24 horas de lunes a sábado por la mañana, en tres turnos, para construir los apartaderos en Belate, mientras que en el resto de las unidades se organizaron dos turnos de 6.00 a 22.00 horas, con puntas de 60 personas trabajando de forma simultánea.