19/07/2018 EL VIGÍA
El presente más inmediato de la tecnología blockchain comenzará a tener impacto en ámbitos como el transporte de mercancías y la logística, y especialmente en el ámbito portuario. En el transporte marítimo de mercancías, el 50% de los costes en materia de contenedores es de tipo documental. El reto pasa por digitalizar el Bill of Lading (documento propio del transporte marítimo que evidencia el contrato del transportista y sirve de recibo y de título de los bienes) mediante blockchain, aportando descentralización, seguridad e inmutabilidad. Así, se reducirían notablemente los costes y el riesgo de las operaciones portuarias. Así se ha puesto de manifiesto durante un acto celebrado por el Centro de Estudios del Transporte para el Mediterráneo Occidental (Cetmo), organizado conjuntamente con el Cercle d’Infraestructures y el Col·legi d’Enginyers de Camins, Canals i Ports de Catalunya.
Esta tecnología puede jugar un papel relevante también en el mundo de la energía, en torno al vehículo eléctrico. A través de contratos inteligentes podrían hacer las gestiones de los recorridos de última milla de los vehículos eléctricos, complementando la oferta de transporte público. La aplicación de esta tecnología en el campo energético va muy ligada a la creación de comunidades solares que aprovechen la energía del sol para complementar su consumo eléctrico creando microrredes comunitarias, que podrían resolver el problema del autoconsumo compartido. Aprovechando estos excedentes de energía para recargar vehículos eléctricos, se conseguiría la utilización de una fuente de energía renovable para la movilidad.
Otro campo que se vería beneficiado sería el de las infraestructuras viarias concesionadas: las autopistas, así como las carreteras en general, están sufriendo también un proceso necesario de digitalización que permita abordar retos como el crecimiento del tráfico, la innovación en la tecnología viaria o la movilidad inteligente. El blockchain podría ser útil en las autopistas a la hora de eliminar intermediarios, por ejemplo, en la cadena de suministro o al seguimiento y control de obras. También serviría para mejorar la colaboración con las autoridades de tráfico, ya que los actores de este ámbito tienen los mismos datos repetidos, con el blockchain se podría progresar en la gestión de incidentes y de crisis, así como en la información sobre los acontecimientos viarios y también abriría la puerta a un nuevos sistemas de pago más precisos, con descuentos según la meteorología o el estado de las vías.