La longevidad de los vehículos pesados en España alcanza los 14 años de media

23/01/2018 EL VIGÍA

El parque circulante español envejece. La edad media se eleva en los vehículos comerciales ligeros hasta los 12,5 años y en los industriales hasta 14 años, muy por encima del de turismos, que se queda en 12. Según las estimaciones de Anfac, de no haber políticas activas para renovar el parque, en 2026 circularán por España más de cuatro millones de vehículos con una edad superior a los 20 años.

La tasa de achatarramiento del conjunto del parque español fue en 2017 de un 56%. Es decir: por cada 100 nuevas matriculaciones se enviaron al desguace 56 viejos vehículos. Anfac recuerda que este porcentaje llegó a alcanzar el 100% con los planes Pive en vigor. Contar con un parque tan envejecido tiene consecuencias poco deseables desde el punto de vista medioambiental y de la seguridad vial: más emisiones y menos sistemas de seguridad en los vehículos.

“La renovación del parque debe ser entendida como una herramienta fundamental de la gestión inteligente de la movilidad sostenible, eficiente y segura: de nada sirve que la tecnología evolucione si la dejamos de lado y no permitimos que forme parte de las soluciones. El binomio regulación-tecnología debe ser un pilar esencial para hacer frente al gran reto de la movilidad”, según Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de la entidad. Esto se corrobora con los últimos datos sobre siniestralidad vial en España facilitados por la dirección general de Tráfico (DGT). En el año 2017, la edad media de los turismos implicados en un accidente mortal fue de 13,8 años. En el caso de las furgonetas la edad media se situó en 12,8 años.

A mayor antigüedad de un vehículo, más cantidad de emisiones salen por su tubo de escape. La incorporación de la última tecnología disponible asegura el menor impacto ambiental tanto a nivel global como local. Hoy los vehículos forman parte de la solución para mejorar la calidad del aire.

La tecnología que en la actualidad incorporan los vehículos de bajas emisiones Euro 6 favorece la reducción de gases de efecto invernadero (CO2) y de emisiones contaminantes (NOx, CO y partículas), contrarrestando las consecuencias medioambientales más negativas asociadas al transporte. Un vehículo actual emite un tercio menos de CO2 y un 85% menos de óxido de nitrógeno que uno de hace sólo 10 años.