20/09/2016 EL VIGÍA
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y el presidente de la Generalitat de Catalunya, Carles Puigdemont, han anunciado ayer por la mañana la creación de una comisión técnica de seguimiento permanente del Corredor Mediterráneo. El anuncio se ha realizado durante la cumbre celebrada en Valencia para impulsar un frente común de los dos territorios a favor de Corredor Mediterráneo, una infraestructura clave para el crecimiento y la competitividad de todo el eje mediterráneo, en opinión de ambos presidentes autonómicos. Los encuentros se mantendrán, a partir de ahora, cada seis meses.
Agentes económicos, sociales e institucionales han asistido al acto, que se ha desarrollado en el Palau de la Generalitat Valenciana y que es continuación del celebrado el pasado mes de mayo en Barcelona. A la reunión han asistido los consejeros de ambos Gobiernos en materia de transporte e infraestructuras. Por parte de la Generalitat Valenciana, el titular de Economía Sostenible, Rafael Climent, y la consejera de Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador; y por parte del Gobierno catalán, los responsables de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, y de Empresa y Conocimiento, Jordi Baiget. Además, han participado en el encuentro los presidentes de los puertos de Barcelona, Valencia, Tarragona y Castellón.
Ximo Puig ha destacado el “nuevo marco de relaciones creado entre ambas autonomías para lograr la puesta en marcha del Corredor” y ha destacado “ la defensa de los intereses comunes que van a emprender conjuntamente los dos territorios “a los que pretendemos sumar más comunidades autónomas”. El presidente valenciano ha subrayado el volumen de negocio entre las dos regiones, tanto en importación como exportación, que supera los 10.000 millones de euros. Puig ha recalcado que el Corredor Mediterráneo es “un proyecto prioritario para los dos territorios, clave para el desarrollo económico de todo el eje mediterráneo”. Según sus datos, su trazado concentra el 44 % del PIB de todo el Estado español, el 50 % de las exportaciones y las importaciones y el 47 % de las empresas.
Para Carles Puigdemont, la infraestructura está atascada “ por falta de neutralidad del Gobierno de España”. En su opinión, “ aunque en la actualidad se encuentre en funciones, el ministerio de Fomento continúa ejecutando obras, como el AVE a Galicia”. Para Puigdemont, es necesaria “la configuración de una agenda de grandes infraestructuras europeas en las que ocupe un lugar prioritario el Corredor Mediterráneo”.
Ambos presidentes han destacado que la “incomunicación mantenida hasta ahora entre ambas comunidades ha mermado posibilidades de crecimiento de las dos autonomías”. Tanto Puig como Puigdemont han adelantado que “a partir de ahora, la estrategia conjunta va a permitir mayor presión sobre el Gobierno central” y que centrarán todos sus esfuerzos en que el Corredor Mediterráneo “sea una realidad” Para el presidente catalán, “no se puede gobernar de espaldas al Mediterráneo”.